Amas a alguien. Esa persona no te ama. Te duele El dolor empeora con el tiempo. ¿Qué hacer?
¡Cierra tu imaginación!
Lo que te duele es la idea imaginativa de que solo si esa persona te hubiera amado, ambos habrían pasado un buen rato para siempre.
Esa imaginación de que la compañía del otro hubiera mejorado mucho tu situación actual y te hizo una persona muy feliz es lo que hace que te ahogas cada vez más en el dolor. Naturalmente, con más tiempo, la imaginación toma alas y la pérdida de felicidad se hace más y más grande en mente, empeorándola en lugar de mejorarla.
- Si amo a alguien, ¿es un crimen?
- ¿Qué hice mal? ¿Por qué no puedo ser amado? ¿Por qué no merezco ser amado?
- ¿Qué digo si me pregunta por qué lo amo?
- ¿Cómo puedes elegir entre dos personas si las amas por igual?
- Si un hombre realmente ama a una mujer, ¿por qué le cuesta tanto decirlo?
Entonces, no le des alas a ese tipo de imaginación que te hace sentir peor. En cambio, retroceda en el tiempo y recuerde situaciones en las que la realidad fue una gran decepción en comparación con las expectativas que había imaginado antes.
Y de eso se trata la vida:
La realidad es una imagen aguada de la imagen rosada que la imaginación siempre pinta en la mente con la esperanza de visitar un lugar lejano o encontrarse con un ser querido o conseguir algo que actualmente no está disponible, lo que hace que uno tenga ganas de verlo.
Esa es la razón principal del dicho: “¡No desees un favor, puedes obtenerlo!”
Si aún tiene dudas, no necesita mirar más allá de todos esos amargos divorcios que tienen lugar después de que las parejas se enamoraron y se casaron (muchas veces en contra de las aprobaciones de sus padres y de la sociedad) con la esperanza de ser felices para enfrentar la dura realidad. de las responsabilidades familiares y vivir con otros 24 horas al día, 7 días a la semana, cuyas idiosincrasias y peculiaridades de hábitos no se expusieron en las reuniones y reuniones que las parejas tuvieron antes durante el noviazgo.
Entonces, si piensa con calma y acepta que puede haber una razón (conocida solo por Dios) para lo que enfrenta en la vida actual, y decide no revolcarse más en la autocompasión, pronto saldrá de la rutina que es. Entra y comienza a disfrutar de la vida yendo con entusiasmo a conocer amigos y visitar lugares. Todo lo mejor.