¿Cuál es tu opinión del matrimonio transnacional?

Un matrimonio transnacional presenta desafíos que el matrimonio de individuos del mismo país no presenta. Las diferencias culturales tienen el potencial de crear malentendidos y pueden existir complicaciones prácticas, por ejemplo, dónde vivir, cómo criar a los niños, cómo dividir el tiempo que pasan con las respectivas familias extendidas. Sin embargo, cada matrimonio presenta desafíos, y la importancia de esos desafíos depende de las personas involucradas y de sus circunstancias. ¿Las dos personas se aman, y son capaces de hacer los sacrificios y compromisos necesarios para que cualquier matrimonio funcione? ¿De qué dos países son, y en qué país vivirán? Algunas culturas están más abiertas a alguien de otra cultura. Si la pareja vivirá en un país que no le gusta a los extranjeros, el matrimonio enfrentará dificultades adicionales. Si la relación puede sobrevivir a esas dificultades depende de los individuos involucrados.

No puedo generalizar sobre el matrimonio transnacional. Al igual que el matrimonio “uni-nacional”, depende de los individuos, y no ofrecería consejos sobre si dos personas deberían contraer ese matrimonio. Tienen que determinar por sí mismos si es lo correcto.

Lo mismo que con el matrimonio transracial: cualquier cosa que rompa barreras es, en última instancia, algo bueno. Pero al igual que con el matrimonio transracial, puede traer problemas adicionales. Tenemos una amiga estadounidense cuya esposa es ciudadana mexicana y, en el clima político actual, tiene miedo de ir a México para administrar su propiedad porque podría tener dificultades para regresar a los EE. UU.