Un buen punto de partida es observar si puede responder afirmativamente a la mayoría de los siguientes:
- Se admiran
- Escuchas y eres escuchado.
- Se perciben como su mejor amigo.
- Cada uno siente que el otro ama a uno, más que uno ama al otro.
- Sus principios más básicos, sus valores fundamentales y su moral son casi idénticos, aunque puede tener personalidades absolutamente diferentes.
- Usted se comunica, verbalmente, en silencio, cuando está apartado o como quiera que sea. Nunca o rara vez dejas de comunicarte, y cuando estás lejos, extrañas tener a tu pareja a tu lado.
- Ustedes no se estrangulan. Sientes la necesidad de estar juntos pero respetas la individualidad de los demás.
- Usted es absolutamente honesto el uno con el otro, sus desventajas, sus finanzas, sus peculiaridades, todo
- Tienes similares o satisfaces las necesidades sexuales del otro. Tú sabes, entiendes y respetas los límites sexuales del otro.
- Usted tiene ideas similares con respecto al control de la natalidad y los niños (tener o no, el número de niños, si corresponde, su formación, educación y responsabilidad de cada uno en el proceso)
- Sus ideas respecto de la religión, la política y otros puntos de vista sensibles son iguales, similares o, a lo sumo, lo suficientemente cercanos como para no generar diferencias serias en su relación.
- En general, te sientes más completo como pareja que como individuo.
- Se ríen juntos más a menudo que no. Tienes la capacidad de reír juntos y al mismo tiempo el uno con el otro sin ofender.
- Cada uno de ustedes quiere dar al otro la felicidad.
Buena suerte