Tengo 29 años y tuve un bebé con mi pareja hace unos meses. Al principio mi papá me repudió porque no estoy casado, pero ahora acepta al bebé. Ahora mi papá dice que si vivo con mi pareja, dejará de hablarme otra vez. ¿Debo decirle a mi padre la verdad o mentirle sobre mudarse con mi pareja?

Mira, lo entiendo, estás en un lugar difícil. Amas a tu papá y amas a tu pareja. No quieres tener que elegir entre ellos. Pero, como ya se ha dicho, mentir no lo va a mejorar.

A los 29 años, eres una mujer adulta y puedes vivir tu vida como quieras. Esa es tu decisión. Y tu papá puede aceptarlo o no, esa es su elección. Entonces dile la verdad, y la verdad te liberará.

Al final, esta no es una situación en la que puedas mantener una mentira. Al final, tu padre descubrirá quién vive en la casa contigo. Así que bien podrías decir la verdad desde el principio.

Si tu padre es una persona peligrosa, si es capaz de hacer algo mucho peor que no hablarte, entonces debes desaparecer en silencio en algún lugar donde nunca te encontrará.

Pero a mí me parece que las amenazas de “rechazo” de tu padre no son serias. “Nunca volver a hablarte” probablemente significa “no hablarte durante varios meses”. Así que dile la verdad y espera la tormenta. Es poco probable que arruine tu vida o la suya.

Yo también vengo de una cultura conservadora, así que entiendo tu situación. Sin embargo, mentir sobre eso no lo hará mejor. Solo dile a tu padre la verdad y termina una vez más. Eso les dará a ambos tiempo para adaptarse a la situación, por muy desordenada que pueda ser. Si mientes al respecto, empeorará y la mentira simplemente se multiplicará. Por cada camino de la vida que elijamos, hay consecuencias, sean buenas o malas. Depende de usted decidir cómo quiere manejar lo malo (la desaprobación de su padre) en lugar de lo bueno (tener una familia cariñosa y amorosa). Quién sabe, tu padre podría sorprenderte y, si no lo hace, es su pérdida. Tiene un nuevo nieto maravilloso del que puede ser parte de la vida. Depende de él si quiere o no, pero al menos se lo pone fácil, es decir, no le mientas.