En igualdad de condiciones, en general es mejor mantener tu propio nombre. El mundo se ha encogido y todos estamos acostumbrados a diferentes tipos de nombres.
Cambiar legalmente su nombre (el que sea) también significa tener que cambiar o actualizar sus diversos documentos oficiales y legales, además de otros detalles como cuentas bancarias, certificados de educación, etc. Eso puede ser una tarea enorme.
Es un juego de pelota diferente con actores y personalidades de los medios. Los nombres son parte de su comercialización y comercialización. El verdadero nombre de Judy Garland era el prosaico Frances Gumm, Cary Grant era el mayordomo Archibald Alexander Leach, Michael Caine es el insoportable Maurice Joseph Micklewhite.