Esta es una pregunta complicada. Algunos niños se escapan porque piensan que la vida en el hogar es difícil y que en realidad se acaba de derramar, otros se van porque realmente se están alejando del abuso. Hay un tercer grupo que es retirado o expulsado porque el adolescente es abusivo o está fuera de control.
Las personas que trabajan con estos niños los han visto todos y no todos quieren que la policía u otras autoridades se involucren. Solo quieren avanzar. A veces se trata de una compensación por ser capaz de ayudar al niño frente al niño huyendo de la ayuda por temor a tener que revivir el trauma.