Estoy muy enamorado de un chico de mi tanda. No lo amo, pero me gusta mucho. Se lo confesé. Antes solía echarle una mirada furtiva, ¡pero después de esta confesión es difícil mirarlo de esa manera! ¿Qué tengo que hacer?

no lo mires …

has hecho tu parte (si le has hablado de tu atracción), ahora el balón está en su cancha …