El macho tiene una serie de ventajas físicas masivas que lo benefician en este escenario de lucha:
- Mayores cantidades de testosterona le dan más fuerza y agresión.
- El ángulo en el que su fémur se conecta a su rodilla le da una mayor eficiencia en el movimiento lateral en comparación con la mujer
- Más capacidad para sudar, por lo tanto, más desplazamiento de calor que lleva a una recuperación más rápida del esfuerzo físico extremo
Las ventajas de la mujer (caderas más anchas, mayor grasa corporal) le dan poco beneficio a la lucha, en cambio le permiten una mayor capacidad para sobrevivir al parto y criar a un niño en un entorno hostil.