El sueño o la somnolencia disminuye la actividad del cerebro. Cuando el sistema que induce el sueño, es decir, el sistema de activación reticular (RAS) en el tronco cerebral deja de funcionar, la persona se duerme. La detención de RAS conduce a la depresión del centro vasomotor, disminuyendo así la frecuencia cardíaca.
En muchos trastornos que afectan la frecuencia cardíaca, como el hipertiroidismo, tomamos la frecuencia cardíaca del sueño para ver si la frecuencia cardíaca rápida es real o ficticia.