¿Cómo debo reaccionar cuando mi esposa pelea conmigo sin ninguna razón?

Primero, lo mejor que puedes hacer es reaccionar con calma con preguntas (no demandas) para tratar de entender lo que la está molestando.

Si ella solo quiere estar enojada, y usted es la persona con la que lo está sacando, puede aceptar el hecho de que todos tenemos estados de ánimo y, a veces, se manifiestan de maneras que no son productivas ni perjudiciales.

En segundo lugar, puede decirle con calma que no existe para que ella pueda abusar, de modo que pueda resolver sus frustraciones, y que mientras escucha sus frustraciones, no va a participar en argumentos inútiles (literalmente). Si tiene que hacerlo, levántese y váyase, diciéndole que le encantaría hablar con ella cuando las tensiones no sean tan altas.

Por supuesto, eso es lo que debes hacer, y lo que trato de practicar yo mismo. Lamentablemente, también tengo mi propio estado de ánimo y, a veces, me indigno y respondo negativamente también.

Hay una razón.

Nadie lucha sin razón.

Averigua qué es, si puedes. Tal vez está irritada por el trabajo, tal vez tuvo un viaje muy malo a casa, tal vez peleó con su madre o amiga antes, tal vez eres tú.

Tenemos una regla en mi casa: si alguien dice: “Estoy de mal humor, déjame en paz”, tienes que dejarlos en paz. Si no lo haces, has sido advertido. Puedes esperar una pelea.

No la desprecies o trivialice su ira, solo dile que la amas y que le vas a dar algo de espacio. Luego, salga del camino hasta que ella se calme. Tal vez vaya a recoger algo para cenar, o traiga algo que le guste para que se sienta mejor.

Abrazarla, tocarla, abrazarla y consolarla. Dígale que todo va a estar bien y que este día pasará. Pídele que descanse contigo. Sostenla. Todos los días, pregúntale qué puedes hacer por ella. Intenta escuchar y entender la fuente de su frustración. Haga preguntas en otros momentos cuando esté tranquila y no se ponga a la defensiva. Simplemente piense en sus respuestas para ver dónde puede mejorar y dónde puede encontrar puntos en común. Sea amable en cualquier circunstancia.

Supongamos que en su mente, ella tiene una razón. Puede que no sea una buena razón, pero probablemente no se lo está inventando a menos que sienta que tiene que hacerlo.