Depende de los padres y del niño. Por ejemplo, si un padre está muy estresado por seguir todas las “reglas” para la crianza con apego, el bebé puede percibir ese estrés y puede hacer más daño que bien. Es lo mismo con cada estilo de crianza: ser verdaderamente bueno para los padres y el niño, tiene que ser único y adaptable a las personas en la relación.
Seguramente puede encontrar toneladas de información conflictiva acerca de cómo la crianza con apego es la mejor y la peor opción. En última instancia, hay demasiados factores para identificar de manera realista qué estilo de crianza es el mejor y aplicarlo en todos los ámbitos.