¿Por qué me siento tan avergonzado de señalar los errores de mi padre?

Si realmente quiere ayudar a su padre, en lugar de señalar los errores, use el tacto y pregunte si un asunto en particular podría haberse abordado de manera diferente para obtener el resultado deseado y observar su reacción. Comience con su negocio, luego su salud mantendrá el último asunto de la familia, después de conocer su reacción a sus sugerencias iniciales. Normalmente, un padre estará muy feliz de notar el interés de su hijo en mejorar el negocio familiar y su salud. De hecho, incluso estará secretamente orgulloso de ti al respecto, siempre y cuando tus sugerencias sean realmente buenas y no poco prácticas. Entonces, adelante, ayúdalo. Todos los papás del mundo pueden hacerlo con la ayuda adicional de sus hijos. De Verdad.

Porque es una falta de respeto a tu padre.

Aquí déjame intentar explicar mi comentario. De niño creciste creyendo que tu padre lo sabía todo porque era tu padre. =) Esto es bastante normal! Creo que es seguro asumir que a usted también se le enseñó a no cuestionarlo porque él era su padre y lo sabía mejor. Una vez más, esto es bastante normal. Ahora que has envejecido y has aprendido diferente. Usted ve sus errores. Pero cuando los señala, se siente mal y ahí es donde se podría decir que es una falta de respeto. Y está bien sentirse así para ser honesto. Pero recuerda una cosa … tu padre creció en un momento diferente al nuestro. Allí, la forma de pensar está marcada en el tiempo y lo que usted sabe es cometer un error que él no comete. También considera el hecho de que tu padre está envejeciendo y con la edad la mente se desliza. =) Solo recuerda ser amable al corregirlo.

Una buena manera sería preguntar en lugar de señalar que un movimiento en particular fue incorrecto. Puedes ser como ‘Papá, ¿no habría sido mejor haberlo hecho de esta manera?’.

O decir de una manera menos ‘señalada’. ‘Hola papá. Sobre eso …. Tal vez considere hacer esto … y así sucesivamente.

Una vez que se establezca creíble, puede discutir todo libremente. Pero mejor no llames al error un error absoluto. Deje que él lo descubra proporcionando mejores opciones.

Es difícil decirle a un padre que están equivocados. Estamos acostumbrados a ver a nuestros padres como omnipotentes cuando somos niños. ¡Es difícil crecer para criticar a las personas que nos enseñaron a caminar y hablar!