¿Cuáles son algunos problemas comunes en una relación / matrimonio sunita?

Gracias por A2A.

Conozco a 5-10 parejas sunitas y chiítas y algunos son amigos de la familia muy cercanos y, si lo pienso bien, se enfrentan a muchas complicaciones en su matrimonio. Como a veces el cónyuge sunita no está de acuerdo con las formas y rituales que realizan los chiítas.

Muchas veces, los niños se enfrentan a muchas complicaciones, como el debate constante, como si los niños fueran sunitas o chiítas. Si la madre es una chiita religiosa, llevará a sus hijos con ella a rituales y eventos chiítas. Considerando que, en algunos casos, si el padre es un sunnita religioso, restringiría que sus hijos vayan a eventos chiítas, etc.

Creo que surgen muchos problemas entre la pareja con respecto al mes de Muharram y Safar porque uno de los cónyuges puede impedir que el otro asista a sus eventos religiosos. El cónyuge chií también puede negarse a asistir o participar en cualquier otro tipo de ocasión feliz. A medida que esos dos meses, los chiítas conmemoran la muerte del Imam Hussain (AS).

Los sunitas y los chiítas pueden casarse. Parece que he terminado el problema pero no lo creo.

En la práctica, simplemente no es “complicado”, sino también “imposible”. Si acude a una persona de mente abierta, seguramente le dará una conferencia de 10 minutos sobre “islam e igualdad”.

En mi opinión, no creo que “los sunitas y los chiítas sean IGUALES”. En realidad, “sunitas y chiítas son equivalentes”. ¿Cómo puedes aceptar vivir toda tu vida con una familia de conceptos diferentes? No va demasiado fácil. El resultado es que uno de ellos ha llegado a la relegión de otro.

Te daré un pequeño ejemplo. Supongamos que soy un viejo padre sunita. Tengo una hija. Cuando tenga que casarme con ella pensaré en una persona de buena riqueza, salud y buena familia. No me arriesgaré por su futuro. Entonces, ¿cómo puedo pensar en casarme con ella en la familia chiíta sabiendo que puede causar muchos problemas? Puedo dar muchos ejemplos de mi propia experiencia.

El matrimonio de un hombre musulmán y una mujer musulmana es válido aunque su religión pueda ser diferente. Sin embargo, es mejor tener en cuenta que todas las partes deben asegurarse de que la otra parte, que pertenece a una secta diferente, no le impida hacer lo que se le exige que haga según su religión y que la otra parte no lo obligue hacer lo que está en contra de su religión. Además, se debe tener en cuenta que la vida conyugal de tal pareja a menudo encuentra dificultades y que las diferencias religiosas entre ellos llevan a problemas que deben ser tomados en consideración por ambas partes.