Ciertamente no. Acordar una fecha por lo general significa querer conocer mejor a alguien, para que luego pueda decidir si desea todas esas cosas con ellos en el futuro si las circunstancias lo permiten.
Si su suposición fuera correcta, la violación de la fecha sería inexistente, ya que el consentimiento de alguna manera se dio “implícitamente”.