¿Es bueno columpiarse en un matrimonio?

Eso es un poco como preguntar “¿es buena la mostaza en un sándwich de jamón?” A algunas personas les gusta la mostaza, otras odian la mostaza y otras no comen jamón.

Lo que trato de decir es que tu pregunta no puede ser respondida porque depende de la gente. Para algunas personas, el swing es increíble para su matrimonio. Los acerca más juntos, les permite experimentar cosas nuevas, les enseña nuevas habilidades sexuales. Para algunas personas, el swing es una idea terrible.

Las personas que conozco que han tenido experiencias positivas con el swing tienden a tener ciertas cosas en común:

– Están seguros de sí mismos y de sus relaciones.
– Tienen buena autoestima.
– tienen una buena comunicación y pueden hablar abiertamente entre ellos sobre cualquier cosa (incluso sobre el sexo) sin miedo ni vergüenza.
– No son posesivos, controladores o inseguros sexuales.
– Son flexibles y resistentes.
– Entienden que los sentimientos no son hechos; es posible sentir emociones inesperadas, sorprendentes o incómodas sin actuar, enloquecerse o suponer que alguien está haciendo algo mal.
– Tienen integridad y valoran la honestidad y transparencia en su relación.