No es traición. Es amor y está destinado a suceder en algún momento u otro donde haya amigos del sexo opuesto. Es por eso que estas amistades pueden complicarse mucho a veces.
Entonces, el chico debe preguntarse: “¿Puedo manejar solo el hecho de ser amiga de ella y la posibilidad de que ella pueda decidir salir con otra persona?” Si la respuesta es “no”, él tiene que avisarle y retirarse. Si la respuesta es “sí” (y ella está dispuesta a seguir siendo amigas), deberían conversar. Debería prometer no profesar sus sentimientos, una vez más, si eso la hace sentir incómoda.