Cuesta una probabilidad. Una probabilidad de nunca ser entendido. Una probabilidad de nunca ser amado. Una probabilidad de intercambiar todos los sentimientos para que dejes de doler. Una probabilidad de intercambiar pasión por la paz.
Esos son los costos. Hay mayores probabilidades de que no se puedan etiquetar los costos, y esas son las que hacen que valga la pena soportar los costos insoportables.