¿Por qué crees que es que los juegos imitan la vida?

Los juegos no imitan la vida. Los juegos son la vida. La vida es un juego.
Un juego se define como tener metas, libertades y barreras, en las cuales uno participa para superar esas barreras y utilizar las libertades para lograr la meta.

Un juego sin ninguno de estos tres o un conjunto proporcional de estos, entonces el juego ya no valdrá la pena.

Al igual que con la vida, si una persona tiene demasiada libertad, demasiadas barreras o ha obtenido o desea obtener demasiados objetivos, puede volverse abrumadora y ya no vale la pena el esfuerzo. En la mayoría de los casos, las personas deciden comenzar de nuevo y continuar con una perspectiva diferente cuando esto sucede. Otras veces, dejaron de jugar todos juntos.