¿La diferencia? Todo.
Como la diferencia entre mi amor por mis primos y por mi hermano. Hay cosas que daría (o pediría) a mi hermano que no pensaría en dar o pedir a mis primos. Y es lo mismo para la diferencia entre mi hijo y mi sobrina y sobrino.
Curiosamente, antes de que naciera mi hijo, mi esposa y yo hablamos acerca de estar más involucrados en la vida de nuestra sobrina y sobrino si no tuviéramos hijos propios. Hijo vino y cambió todo eso. No es que no estemos involucrados, sino que estamos más comprometidos emocionalmente con nuestro hijo.
Supongo que esa es la principal diferencia – la inversión emocional.
- ¿Puedes odiar a los miembros de la familia?
- ¿Es verdad que a veces un hijo y un padre no pueden llevarse bien sin importar qué?
- ¿Cuál es el mayor beneficio de ser parte de tu familia?
- ¿Qué quiere una mujer de la sociedad, familia y pareja?
- ¿Cuál es la pregunta más común que hacen mis aldeanos e incluso algunos de los miembros de mi familia que están frente a mí?
El amor (estoy hablando de amor familiar aquí) tiene muchas sutilezas y diversas profundidades.
Y eso sin contar toda la genética.