Tienes razón en resistirte a convertirte en una persona odiosa. Mantén el rumbo en ese punto.
En cuanto a tus padres, están haciendo lo mejor que pueden. Dales un descanso y date cuenta de que puedes superar todo y ser mejor de lo que son. No los odies. Ellos te aman. Ellos simplemente no saben cómo mostrarte.