Imagina que ejecuté una campaña publicitaria en la que utilicé un artista de voz en off que sonaba igual que John Lithgow (o alguna otra estrella famosa). ¿Podría la estrella demandarme?

No soy abogado, pero me imagino que a menos que estuvieras insinuando en el anuncio que la voz era un personaje con marca registrada, probablemente estés bien.