Si la madre no está preparada, el bebé podría sufrir.
Puede
Si la madre tiene un aborto, el bebé estará muerto.
Será.
Argumento simplemente que si una mujer no está preparada para aceptar las ramificaciones de sus acciones, sin infligir la muerte a otros, no es lo suficientemente madura como para tener relaciones sexuales en primer lugar. No es difícil vivir bajo los medios de uno. Para ahorrar, invertir y construir una vida mejor para nosotros, mi esposa, nuestra hija, nuestra hija aún no nacida y yo subsistimos con menos de $ 600 por mes en un área del norte de Europa con gastos de vida muy por encima del promedio de la Western Mundo. Potencialmente, podríamos reducirlo a poco menos de $ 550 con un ligero perjuicio a nuestro nivel de vida, si es necesario.
Si vive intencionalmente y planifica cuidadosamente, es totalmente posible vivir con medios muy pequeños. Una de las primeras cosas que sugiero es que una madre se prepare visitando una sinagoga o iglesia cercana y busque ayuda allí. No solo ayuda material, sino sobre todo el tipo de ayuda que viene con una nueva perspectiva de la vida. Los judíos, con su tsedakah, tienen una actitud excepcional con respecto a la caridad. Personalmente estoy involucrado en los círculos luteranos de Confesiones, y la gente allí también es genial. Conozco a muchos católicos que podrían poner un techo sobre su cabeza, ayudarlo a encontrar un trabajo y encontrar cuidado de niños … simplemente no juegue el estúpido juego en el que está tan “orientado hacia mí” que no proporciona valor a los demás y se da cuenta de lo Principio fundamental de la economía: su demanda personal es igual a su oferta personal.
Dado que el tema de la violación y el incesto comprende a lo sumo el 1.5% de los abortos, podemos asumir con seguridad que la verdadera razón del movimiento a favor de la elección se basa en la idea de que una mujer tiene derecho a tener relaciones sexuales sin asumir la posibilidad de concepción. , y que este “derecho” reemplaza el derecho que un embrión o feto tiene a la vida.
Creo que la idea de que el derecho de una mujer a tener relaciones sexuales sin asumir la posibilidad de una concepción, y que este “derecho” reemplaza el derecho que un embrión o feto tiene a la vida, es indicativo de una bancarrota moral posmoderna debido a que ambos otorgan un superlativo posicionarse a los sentimientos sobre los hechos o, peor aún, tener plena conciencia de las ramificaciones de las acciones de uno y seguir adelante con ellos de todos modos.