¿Puedes dar tu vida por tu hermana?

¡¡¡¡Sí!!!!
La amo más que a nada. Estamos conectados con el alma. Somos hermanas del alma. Las relaciones de sangre son muy importantes para mí. De hecho, no puedo abandonar ninguna relación por mi vida. Protegerla es mi responsabilidad desde la infancia. Definitivamente la elegiré sobre mi vida.