Oye amigo
Mi nombre es Matt. Siempre fui gordo, siempre fui el niño que no podía ir a ninguna parte debido a sus padres, y siempre fui el chiflado de los dos zapatos. Escuché las bromas gordas, escuché las bromas sobre mi cultura y vi los dedos apuntando a mis rollos de grasa. Soporté que mi propio padre me llamara gay y me preparé para los días en que mi hermana me llamaba perdedora. Pero nunca fui el niño que me dejó. Hubo días en que comencé a sentir que el peso de las burlas me arrastraba hacia abajo, había días en que sentía que no era lo suficientemente bueno y había días en los que pensaba irme de casa. Pero nunca fui el niño que dejó que me comiera y me sacara de adentro hacia afuera.
¿Entonces qué hice? Me di cuenta a una edad temprana que ignorar a los niños que hacían estas cosas no serviría de nada más que ser un símbolo para que escapara de mis propios miedos. Y así aprendí la diferencia entre bromas y una broma grosera. Cuando alguien se burlaba de mí, yo volvía a bromear. Hice incontables bromas. Algunos fallaron y otros atrajeron la atención de la clase. La risa es preciosa y me propuse ser la persona más divertida que pudiera ser. Sin embargo, no dejé que nadie se me acercara y decía cosas que no quería escuchar. Comencé a hablar en contra de aquellos que eran tan viciosos para mí y otros como yo. Y a través de eso gané respeto y amistad con los que intentaron romperme.
Regla 1.
Elige ser feliz, pero trabaja para alegrar a los demás.
Regla # 2.
Perdona y olvida.
- Uno de mis amigos (que me gusta) ha encontrado a alguien más. Me alegro por ellos, pero aún me duele un poco, ¿cómo puedo superar mis sentimientos por esta persona?
- ¿Cómo podemos decir adiós a alguien con quien no puedes vivir más?
- ¿Es raro que mi novia no me quiera?
- ¿Debemos renunciar a alguien que nos da señales mixtas?
- ¿Cómo decidir si estoy listo para mudarme al extranjero con mi novia?
Regla # 3.
No dejes que los demás te pisoteen. Manejas un poder inmenso.
Finalmente, me di cuenta de que mi forma física / intelectual no era tan buena como mi forma emocional. Y así comencé a comer menos, ya hacer más ejercicio. A los 16 años estoy en un IMC y peso normales y me esfuerzo por hacerlo mejor. Mis calificaciones fueron “eh”, así que estudié más y también hice más preguntas en el aula. Comencé a darme cuenta de que a medida que me volvía más inteligente, y conforme crecía más en forma, la gente se daba cuenta.
Regla # 4.
Ser un gato de todos los oficios. No es un pony de un solo truco.
Regla # 5.
Las personas se sienten naturalmente atraídas por aquellos que tienen un propósito en la vida. Encuentra tu y persíguelo implacablemente.
En este punto en el tiempo me sentía bien. Me había ganado el respeto de una buena mayoría, estaba haciendo reír a la gente a diario, y mi condición física y mental eran respetables. Pero algo faltaba. Así que todos los días decidí incorporar la interacción con alguien nuevo en mi rutina diaria. Mis habilidades sociales se volvieron competentes y al hablar con personas nuevas todos los días, conocí a algunas personas hermosas.
Regla # 6.
Interactuar con un extraño por día. Progreso a conversaciones completas, y luego relaciones.
Y finalmente algunos últimos consejos que tengo para ti:
Regla # 7.
Quédate con hambre y permanece humilde. El hecho de que lo hagas bien no significa que debas dejar de intentar ser tu mejor yo. Eso también significa que el orgullo es un animal mortal que debes controlar.
Regla # 8.
Tú decides (:
¡Aclamaciones!