Los padres creen que este tipo de control ayudará a que sus hijos crezcan saludables y estén bien adaptados. El problema es que controlar no siempre funciona. Las chicas que no tienen permitido tener una relación recurrirán al sexo casual.
También el control de la crianza de los hijos lleva a esos niños a buscar relaciones de control y, a menudo, abusivas.