Puede evitar el problema afirmando que sus activos están comprometidos o que planea realizar esfuerzos financieros en un futuro próximo, lo que hace que sea necesario que se le respalde cuidadosamente ante posibles emergencias financieras.
O puede tomar la postura plana de que tiene una política de no prestar a la familia debido a la tensión potencial que puede crear en las relaciones.