Quizás seré la voz disidente entre estas respuestas, pero …
Sinceramente, el viaje no es lo que te vas a perder. Podrá viajar, aunque puede decidir ahorrar dinero al principio y mantenerse relativamente local, ya que a los niños pequeños no les importa si el parque está en Francia o Inglaterra o Sri Lanka (o donde sea).
Lo que te vas a perder es el tiempo libre. El tiempo libre bendecido, feliz, cuando puedes recostarte, cuando puedes mirar a Netflix de forma compulsiva, cuando la pregunta más apremiante de un fin de semana es “¿panqueques o waffles?”
Te perderás los días en los que podrías pasar varias horas sin complicaciones leyendo o pintándote las uñas o escribiendo correos electrónicos o abrazando al gato, sin que ningún pequeño humano te toque, se te acerque y te haga preguntas divertidas pero agotadoras. Anhelarás el momento en que puedas terminar una taza de té mientras aún estaba caliente.
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Nada es sagrado o está fuera de los límites en esos primeros años (ni siquiera en el baño) y si bien es halagador que una persona pequeña quiera seguirte a todas partes, a veces se parece a una libélula entusiasta e infinitamente mocosa que zumba al lado de tu oreja, todo todo el dia
Viajar es genial, me encanta viajar, pero incluso si tienes un ‘babymoon’, considera seguir este consejo:
NO HACER NADA tan a menudo como puedas
Créeme.