Usted está teniendo un mal momento y no es de extrañar que se sienta al final de su atadura. Después de cuatro años de estos problemas recurrentes y que nada parece cambiar, puedo entender por qué sientes que ya no puedes hacer frente. Sin embargo, te sientes culpable por querer dejarla y lo entiendo. Piensas que todos te mirarán y crees que la has traicionado y que la has rescatado.
Creo que necesitas ir, al menos por un tiempo, y volver a estar juntos. Usted está estresado, sin duda está agotado de alentar constantemente a su novia. No dices qué problemas están presentando los padres, pero (perdóname si me equivoco aquí) tienen que subir al plato y hacerse cargo por un tiempo. Con respecto al embarazo, si ella tiene problemas de salud graves, tal vez deba retroceder un paso allí también por un tiempo. Obviamente estás preocupado por esto y sí, un bebé sería un desastre para todos en este momento.
Llega un momento en el que tienes que cuidar tu propia salud emocional y física y mantener constantemente a otra persona cobra un precio enorme, uno de los cuales a veces no somos conscientes hasta que se resquebraja.
¿Es posible que visites un lugar distante durante unas tres semanas? Si toma un descanso y se aleja del problema, entonces puede tomar una decisión razonada sobre qué hacer con la relación. Si no puede escapar, tal vez le ayude tener un poco de asesoramiento o una conversación con una persona de confianza en su vida.
- Peleamos mucho. Un día, dijo: ‘no debemos hablar’. Dejamos de hablar pero después de 4 días me llamó más de 4 veces. ¿Realmente me ama?
- Mi novio me dijo que no pusiera ninguna esperanza en nuestra relación. Él es 26, 10 años más joven. ¿Qué tengo que hacer?
- ¿Cómo perseguiré mi vida empresarial si me hago mayor y más y tengo que empezar a pensar en la vida cotidiana y otras cosas?
- 48 y nunca he tenido una cita, ¿debería estar preocupado?
- ¿Está bien trabajar en la misma compañía que mi novia?
Eres una persona amable y decente, así que, por favor, deja de enojarte por lo culpable que te sientes. Es perfectamente normal sentirse así, especialmente después de un camino tan largo y duro.
Te envío un abrazo de abuela, porque siento que necesitas uno ahora mismo.