Los niños que tienen TDAH en su mayoría tienen un buen coeficiente intelectual (cociente inteligente) que la inteligencia emocional. No pueden controlar su frustración, enojo, ansiedades, hiperactividad como lo hacen los niños normales. Es un momento difícil para los niños con TDAH y sus padres.
Necesita un buen asesoramiento y ejercicios de respiración y meditación.
Deben ser animados y motivados y hacer que se mezclen con amigos y muchas actividades.
Teniendo súper alimentos como las nueces, las semillas de lino, el aceite de almendra con leche los enfriará. El jugo de Tulsi (occimum sanctum) es mejor para el TDAH para reducir la ansiedad y los cambios de humor y para realizar sus actividades diarias por sí mismos.