La gestión de la reputación es un término generalmente nuevo. Parecía en cierta medida debido a la nueva accesibilidad de los datos que una vez pudieron haber permanecido privados, pero hoy en día están disponibles de inmediato, y legalmente como un componente del área de la sociedad en general.
La reputación importa ya que es un activo de capital, nuestro capital humano. Es la manera en que otros nos ven y se dan cuenta de quién se sentará en nuestra mesa, poco a poco y profesionalmente. Eso implica que debemos contemplar lo que decimos y cómo actuamos. Para decirlo claramente, adopte una estrategia más supervisada para nuestra reputación: evaluar su ejecución, protegerla de los peligros y supervisarla el mayor tiempo posible.