Cuando envejeces, naturalmente también creces como persona, pero hubo algunas cosas que me ayudaron más que otras:
- Clase de actuación, tienes que experimentar que tienes una presencia muy especial, que puede hipnotizar a los demás.
- El deporte, para mí fue la lucha deportiva. Es asombroso entender que no solo eres un cerebro, que se da la vuelta. Tú también eres un cuerpo. En realidad fue una gran sorpresa para mí.
- Sufrimiento e injusticia, cuando experimentas que el mundo no es todo sol y mariposas, cuando ves que a veces los que están a cargo abusan de su poder y otros no pueden hacer nada al respecto, te permite hacer la pregunta más importante:
¿Con quién quiero estar en ese juego, dónde estaré? - Intercambios juveniles. Los paises del mundo Hurra. También el ambiente en esas cosas es asombroso. Las interacciones humanas tienen un tipo de intensidad que te deja con el hambre de relaciones más profundas que la bla bla superficial normal.
Yo diría que es un buen lugar para comenzar.