¿Cómo podría uno ser más generoso sin volverse derrochador? ¿Cuál es el límite entre la mezquindad, la generosidad y la extravagancia?

Al ser observador, interesarse por las personas y dedicar su tiempo a las personas.

Si miras por la calle de tu vecindario, ¿hay un vecino anciano que necesita ayuda para que las hojas se rasguen en su jardín o en invierno, podrías sacar la nieve de su camino de entrada?

¿Tienes amigos con mascotas? ¿Puede acariciarlos cuando se vayan y ahorrarles el gasto de abordar a sus animales?

¿Hay una organización benéfica local que busca voluntarios? ¿Puedes dar un poco de tu tiempo?

¿Tienes un vecino que vive lejos de su familia? ¿Puedes invitarlos a tomar una taza de té de vez en cuando para que tengan compañía?

Hay muchas formas de ser generoso que no cuestan mucho dinero.